no entiendo la verdad:
cómo alguien puede tenerlos
ignorando sus deseos.
No creo que tenga sentido,
más el orgullo me impide
dejar a un lado la vanidad,
admitir que he hecho mal,
más cuando en mi pesa
la desdicha de la pereza,
la contradicción del dolor,
que pasa sin temor;
cuando pienso en lo que haré
para tratar de enorgullecer:
los sabores de la razón
que me indica el corazón.
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by Hernan Sanchez on Unsplash
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