Cuando te sientas solo, triste o feliz.
Escribe sin editar, sin corregir, sin pensar.
Escribe lo que salga de tu alma... de tu corazón.
No te pongas a reflexionar sobre qué o por qué... solo hazlo.
Déjalo fluir.
Escribe lo bueno y lo no tan bueno.
Lo que te hace feliz y lo que no.
¿Qué importa lo que digan los demás?
Escribe tus anhelos y metas.
Tus miedos y defectos.
Escribe.
Hazlo a diario, saca las presiones y preocupaciones...
Plásmalas en papel, para que pongas todo en perspectiva y puedas resolver.
Escribe. Como si tu vida dependiera de ello... porque en cierto punto así es.
Y cuando ya no tengas que escribir, déjalo por un rato. Sal, toma aire.
Mira a tu alrededor.
Escribe lo que ves.
Escribe que te hace sentir vivo.
Escribe lo que te apasiona.
Escríbelo todo.
Escribe mucho o poco.
No te preocupes por la calidad, un actor no consigue el estelar sin practicar.
Y te darás cuenta que te sentirás como nunca antes...
Cuando te digan algo que debas recordar, escríbelo.
Cuando necesites despejar la mente antes de un examen, escribe.
Cuando no tengas idea de que hacer, escribe.
Cuando sientas que te asfixias, escribe.
Cuando sueñes algo bonito, escribe.
Cuando tengas pesadillas, escribe,
Cuando tus padres no te comprendan, escribe,
Y verás cómo todo cambia,
todo encaja, todo fluye.
Si te atrae una persona, escribe.
Y si no puedes decirle a alguien como te sientes, escríbele.
Pero no dejes de expresarte... De escribir, porque cuando eso suceda ya no quedará nada.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario